Recuerdo que cada vez que visitaba Madrid, lo primero que hacía al llegar era comprar la Guía del Ocio. Por muy poco dinero se lleva uno toda una enciclopedia del arte de pasarlo bien con infinidad de posibilidades desconocidas incluso para los lugareños. Ahora no hace falta llegar a una gran ciudad para comprar la guía en informarse. Internet nos pone todo el ocio al alcance de los dedos con sólo hacer click en el logo. Por mi parte, seguiré comprando la edición impresa porque es muy interesante para leer en el hotel y preparar las visitas. Ahí sale todo y muy bien explicado. Un enlace para añadir en favoritos por narices. Además abarca toda la geografía nacional, que ya es para alucinar. Así pués, se impone una visita.
Recuerdo que cada vez que visitaba Madrid, lo primero que hacía al llegar era comprar la Guía del Ocio. Por muy poco dinero se lleva uno toda una enciclopedia del arte de pasarlo bien con infinidad de posibilidades desconocidas incluso para los lugareños. Ahora no hace falta llegar a una gran ciudad para comprar la guía en informarse. Internet nos pone todo el ocio al alcance de los dedos con sólo hacer click en el logo. Por mi parte, seguiré comprando la edición impresa porque es muy interesante para leer en el hotel y preparar las visitas. Ahí sale todo y muy bien explicado. Un enlace para añadir en favoritos por narices. Además abarca toda la geografía nacional, que ya es para alucinar. Así pués, se impone una visita.
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