Lo que se ve en la foto va camino de desaparecer definitivamente. Por lo visto los hoteles con piscina se han dado cuenta de que se puede ahorrar dinero suprimiendo las colchonetas de las tumbonas y el fenómeno avanza de modo imparable. La comodidad no es la misma ni mucho menos.
Tras un periplo por hoteles vacacionales he observado que la novedad que comento es una tendencia generalizada. Ignoro la razón pero tengo mis sospechas. Hay que tener en cuenta que los encargados de las piscinas son socorristas y generalmente esas personas son trabajadores ajenos al hotel, contratados para una labor específica que no incluye la colocación de colchonetas, lo cual no excluye que haya empleados del hotel que puedan hacer ese trabajo. También podría existir un autoservicio, pero ni eso.
La reducción de costes en la compra, mantenimiento y reposición de colchonetas trae consigo una evidente merma del confort para los clientes. Lo he visto hasta en hoteles de cinco estrellas.
También me llama poderosamente la atención lo mal que se atiende en muchos hoteles a los clientes que acuden a la piscina cuando falta menos de una hora para el cierre. Por cierto que va siendo hora de que las piscinas de hotel abran en horario nocturno con música chill out y juegos de luces chulos, ya que no todo va a ser bañarse cuando más casca el sol.
Aprovecho para comentar que hay demasiados hoteles vacacionales que tratan con desconfianza a los clientes con los famosos depósitos en fianza por el uso de las toallas, aunque me imagino que sus motivos tendrán...
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